¿Por qué mi gato me lame el cabello?

Muchos gatos lamen y mordisquean el cabello de sus propietarios. Algunos llegan incluso a lamer su barba o las cejas. ¿Es tu caso? Conozcamos qué es lo que motiva a los gatos a adoptar este comportamiento extraño y, sobre todo, sepamos como evitarlo, ya que muchas veces puede resultar verdaderamente molesto.

Razones por las que los gatos nos lamen el cabello

Lamer el pelo de sus dueños es simplemente una muestra de cariño hacia ellos. Habrás apreciado que gatos que viven juntos y se llevan muy bien regularmente se asean el uno al otro como muestra de afecto. Por esa misma razón tu gato lame tu “pelaje”, para demostrarte el cariño que te tiene.

Además generalmente este comportamiento se realiza cuando estamos tumbados o recostados, posiciones que el animal considera tranquilas y propicias para el aseo.

No obstante hay que diferenciar entre lamer y masticar. Si nuestro gato comienza a “masticar” nuestro pelo cuando estamos moviéndonos, lo más posible es que sea un gesto divertido de nuestra mascota jugando con nosotros.

Cuando nos realiza este “aseo” de nuestro pelo, el gato lo que también intenta es eliminar otros olores de nuestro cabello para que formemos parte de su “familia” dándonos el olor de su pequeño clan. Este tipo de cuidados está reservado únicamente a los miembros de su familia verdaderamente especiales, a ésos que quiere integrar en su reducido círculo íntimo de amigos.

¿Qué hacer si este comportamiento nos molesta?

Cuando vemos las razones por las que nuestro gato nos lame el pelo lo normal es que nos sintamos halagados. Pero este comportamiento es lógico que se convierta en molesto, porque no nos dejará ver la tele tranquilos ni disfrutar de la paz del sofá o la cama. Entonces, ¿qué hacemos para que deje de hacerlo?

Por encima de todo no debemos halagar a nuestro gato acariciándole cuando nos lama el cabello. Este gesto el gato lo entenderá como que apreciamos mucho su aseo personal y que le damos las gracias devolviéndole un poco de su cariño. Lo mismo con las palabras bonitas y voces suaves. Éste lo tomará como atención positiva. Estos dos comportamientos son la mejor manera de reforzar involuntariamente este comportamiento y animarles a repetirlo.

La forma de hacerle entender a nuestra mascota que no necesitamos su aseo de una forma poco agresiva es alejándonos de él cuando comience a hacerlo. Así de sencillo. Este tipo de reacción la entiende bien ya que los gatos mismos la practican. Habrás apreciado que muchas veces que no quiere que le acariciemos lo que hace tu mascota es marcharse a otro lado, ¿verdad?

Si el comportamiento en nuestra mascota está muy arraigado y separándonos de él no conseguimos quitarle el hábito, podemos optar por usar repelentes naturales para hacer que la acción sea desagradable para nuestro gato. Lo único que tenemos que hacer es elegir productos para el cuidado de nuestro pelo con aromas cítricos, un olor que los gatos odian en general.