¿Qué hacer en caso de envenenamiento de nuestra mascota?


A muchos nos han envenenado una mascota. Es un dolor tan intenso perder a nuestro animal que muchas veces nos dificulta acercar otro a nuestras vidas. Lo que debes hacer para salvarlo en estos casos o al menos mantenerlo con vida hasta llegar a la clínica veterinaria lo veremos en las siguientes líneas.
EL VENENO
Mencionaremos algunos venenos industriales o químicos, los cuales se pueden encontrar en nuestro hogar o en algún lugar cercano que nuestro gato visite. Existen además plantas tóxicas y alimentos dañinos para los gatos, pero pueden leer al respecto en otros artículos donde ya se han mencionado.
Mayormente los envenenamientos ocurren accidentalmente. No es común una acción malvada, pero puede suceder.
Entre las sustancias venenosas más comunes podemos encontrar: venenos para roedores, arsénico, metaldehído, insecticidas, venenos para cucarachas, anticongelantes, sustancias ricas en fósforo como los fuegos artificiales y otros materiales de pirotecnia, medicina para humanos, derivados del petróleo y corrosivos, entre otros.
Ahora lo más importante es saber de manera general como actuar de manera veloz para salvar nuestro gato.
SÍNTOMAS
Lo ideal sería detectar la intoxicación antes incluso de los primeros síntomas pero esto casi nunca es posible ya que normalmente ingieren los venenos cuando están fuera de nuestro cuidado curioseando como es su costumbre, por todas partes.
Tengamos en cuenta que no todos los síntomas se presentan de manera inmediata y que algunos pueden ser muestra de una enfermedad subyacente. Es importante estar seguros para no confundir algo que necesita tratamiento con algo que terminará definitivamente con la vida de nuestro gato si no actuamos rápidamente.
Los síntomas más comunes de envenenamiento son letargo y depresión, pérdida extrema del apetito, babeo excesivo, temblores y convulsiones. También es frecuente el vómito, y las dificultades para respirar o defecar.
¿CÓMO ACTUAR ANTE UN ENVENENAMIENTO?
Algunos venenos atacan directamente el sistema nervioso central, el sistema respiratorio, o ambos, mientras que otros son anticoagulantes y corrosivos. Es fundamental eliminar el veneno de su cuerpo. Trataremos de eliminar la mayor parte posible.
Si es un corrosivo o algún polvo que se adhiere al manto del gato le observaremos lamiéndose compulsivamente para tratar de quitárselo. Esto es crítico ya que de esta manera ingerirá más veneno. Debemos sostenerlo y bañarlo inmediatamente con abundante jabón y agua tibia.
Si el veneno ha sido ingerido, debemos acudir inmediatamente al veterinario sin perder ni un segundo. Hay otra teoría que afirma que antes que eso hay que inducir el vómito del animal. Los motivos que sostienen es que muchos venenos no tienen solución si la sustancia se mantiene por un tiempo determinado en el estómago del gato, absorbiéndose en su organismo.
El tiempo que ganes induciendo el vómito y por tanto, eliminando una parte del veneno, puede salvar la vida del gato. Pero esta decisión es propia. Habla con tu veterinario para saber qué hacer en caso que lo necesites (aunque esperemos que no lo necesites nunca).
Cubrir sus intestinos con sustancias que retrasen la absorción del veneno es primordial también. Lo combinaremos con un laxante para favorecer la eliminación del tóxico. El carbón vegetal activado o la leche de magnesia son productos útiles a tal efecto, pero si no los tienes a mano puedes usar claras de huevo, aceite vegetal y colocar un enema de agua tibia.
Llevarlo al veterinario cuanto antes. Obviamente esto es lo más importante. Será muy útil y favorecerá el tratamiento el hecho de que aclares que veneno ha sido. Algunos tóxicos tienen antídotos específicos. Si no sabes que venenos es, lleva una muestra de la sustancia y/o al menos una muestra del vómito del gato. Esto puede ahorrar mucho tiempo al diagnóstico específico del envenenamiento.
Con tecnología de Blogger.